La señora "Y" procede a arrendar una vivienda a la señora "X" por un valor de 700€ al mes. Además, también realiza un contrato verbal de arrendamiento de la plaza de garaje. La señora "X" no satisface la renta, llegando la deuda a alcanzar la suma de 3.500€. Junto a esta deuda, tampoco ha satisfecho el pago del agua y de la luz, viendose "Y" en la obligación de hacer frente a esos gastos al seguir siendo titular de la vivienda. Tampoco ha afrontado el pago de las cantidades correspondientes a la plaza de garaje. 

En la oposición a la demanda queda reflejado el interes de Y en vender la vivienda y todos los actos que realiza para conseguir echar a los inquilinos de la misma (No querer recibir el pago de la renta por el arrendamiento de la vivienda, no dar traslado de los recibos de luz y agua a los inquilinos, etc...)

Finalmente se opta por llegar a un acuerdo entre las partes, en el cual queda reflejado la cantidad adeudada en total (Renta de arrendamiento de garaje, renta de arrendamiento de vivienda y recibos pertinentes de luz y agua) y la fecha máxima en la cual los inquilinos tienen intención de desalojar la vivienda.

Llegada la fecha en la cual se pacto que se procedería a desalojar la vivienda, estos aún no se marchan (a pesar de haberse concedido días de gracia) y la parte demandante presenta una Demanda de ejecución con la finalidad de que el Juez los eche de la vivienda, pero poco tiempo después se desestima el lanzamiento de la misma debido a que los inquilinos, de propia iniciativa, hacen entrega de las llaves de la vivienda.

Recuperar la vivienda, procediendo al desahucio de los inquilinos.

Reflejar los meses en los que dichos inquilinos han hecho frente a abonar la cantidad pactada por el arrendamiento de la vivineda, de la plaza de garaje y de la cantidad correspondiente a los recibos de luz y agua pertinentes a los meses que han estado habitando en dicho inmueble.